Annick Bouvattier, artista con sede en París, nació en Nevers, Francia, en 1964. Su padre, pediatra y amante del arte, le transmitió su gusto por la pintura desde su infancia. En 1982, con un bachillerato científico en el bolsillo, abandonó la tradición familiar de estudios médicos para inscribirse en la escuela de moda «Berçot – Marie Rucki», donde, durante dos años, se formó como estilista. Sus creaciones, presentadas en París y Villa Medici (Roma), son muy apreciadas por los profesionales y son objeto de numerosas publicaciones en la prensa especializada.
Sin embargo, más atraída por el desfile de moda que por el de las tiendas, Annick Bouvattier se vuelve muy rápidamente hacia el cine y la publicidad. Diseñadora de vestuario, a menudo trabajará en los estudios de Cinecittà en Roma. Desde sus estancias en Italia, conservará el sabor de los colores cálidos, sensuales y profundos: ocres soleados, rojos apagados, azules intensos, verdes profundos. A principios de 1990, decidió dedicarse exclusivamente a la pintura. Después de dos años de investigación autodidacta, se convirtió de 1992 a 1996 en alumna de Pierre Ramel, discípulo y maestro de Mac’Avoy, quien le enseñó la técnica del aceite de cuchillo para pinturas al óleo, que trabajó sin problemas sin el grosor del material.
Todo en transparencia, Annick Bouvattier pinta (en su mayoría) mujeres, solas o juntas, en apartamentos de la ciudad casi vacíos, amueblados con sombras y luces. Hermosas, jóvenes, viven su feminidad sin falsa modestia, indiferentes a las miradas externas. Lienzos de gran formato, composiciones de primer plano, las obras de Annick Bouvattier son espacios de escape donde lo pictórico disputa con lo emocional.
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