Asya Schween se vino de Rusia a la Universidad del Sur de California en un programa de intercambio para hacer un postgrado de matemáticas. Sus padres eran unos jóvenes ingenieros que le inculcaron ya de pequeña una estricta y constante disciplina. Ahora tiene una maestría en Matemáticas Aplicadas y en Biología Computacional, así como una Licenciatura en Física, pero su verdadera pasión es la fotografía, y más concretamente los autorretratos, un trabajo personal que realiza de forma altruista, «Mis fotos están siendo utilizadas exclusivamente en modo utilitarista solamente para mi propia satisfacción hedonista.»
Las fotografías de Asya están cargadas de cierta belleza mórbida y un oscuro glamour, aunque ella misma dice no sentirse admiradora de este tipo de imágenes «Hago autorretratos por diversión en un intento de escapar del aburrimiento de las matemáticas, así que a veces pasan horas y horas para que pueda hacer una sola fotografía.»
Aunque comenzó haciendo fotografías a objetos y paisajes, un día de forma casual encuentra el verdadero sentido de su trabajo. «Estaba fotografiando un piano abandonado en el patio trasero de mi complejo de apartamentos en un vano esfuerzo por expresar o comunicar mis pensamientos y sentimientos. En un arranque de la irritación giré la pantalla LCD y tomé una foto de mi cara enfadada e, inesperadamente, quedé satisfecha con el resultado. Recuerdo claramente mi emoción y como corrí a casa y empecé a hacer fotos de mi insatisfecha expresión facial.»
Las imágenes de Asya aunque simples en su composición están pensadas dentro de unas instrucciones complejas donde el atrezzo y la expresión forman una base sólida. A veces compra cosas inútiles que le sirven para sus sesiones y las cuales tira después de conseguir realizar la imagen que busca. De la misma forma, el procesamiento de sus imágenes son una parte importante del resultado final, lo que acaba describiendo el estado de ánimo que ella quiere reflejar.
Los retratos de Asya tienen también una fuerte connotación erótica y sexual perfectamente camuflada en un acto privado de su propia percepción visual. Como el resto de su trabajo, ello es solo un ejercicio que va de dentro hacia afuera. Asya captura sentimientos y expresiones en forma de imágenes, les da vida y deja al espectador el trabajo de la interpretación, o de una nueva interpretación.
Asya Schween es sin duda una artista que no nos dejará indiferentes, y si sus autorretratos nos dejan cierto sabor decadente y misterioso, su Doll Gallery se convierte en un denso viaje al lado oscuro del alma, directos al temor y a la inquietud de silencios rotos. Asya se encuentra también en deviantArt.
«Una mujer inteligente, cultivada, matemática, académicamente brillante, que viene de ese extraño mundo de la Rusia post-socialista y produce un arte altamente femenino, puro y con una originalidad notable. En el Arte de esta dama se conjugan creatividad, técnica e inteligencia en las justas y adecuadas proporciones. En su página he visto, gracias a esta referencia querido Enkil, foto-pinturas o pintu-fotos o como quieran ustedes llamar a esta técnica hermosa. Parecen acuarelas hechas sobre fotografía o fotografías de acuarelas. Muy sensibles y bellas. Pero no se queda en eso la señora: aborda su arte con una visión afilada, crítica, profunda, que remueve ideologías purulentas, ideas costrosas y materia neuronal supurante. Que tremendo trabajo!
Asya , como todos nosotros, puede pasar del horror cotidiano a la contemplación estética de una servilleta primorosa, o, como en el caso de ella, a la de unos carros sobre los que se reflejan de manera maravillosa (el tratamiento pictórico es notable) unos edificios sin tiempo. Notable.» (Carlos)
«La artista, con todos sus méritos, se compromete con la vida y explora su mundo como fémina valerosa. Toda la fina sensibilidad descubre mundos sobre mundos, “como en las capas de una cebolla”, su cuerpo, sangre y sensaciones vertidos en imágenes fuertes, desde una desnudez que más se siente que se ve, desde una perspectiva sensacional( de sensaciones) penetra el pensamiento de una sociedad que huele mal, que hiere, que destruye la fantasía del juego sensual y viola el espacio privado con imágenes icónicas de sadomasoquistas religiones. Abarca un amplio espectro de ideas su trabajo que es tanto de denuncia y exposición de circunstancias femeninas y humanas como de recreación visual en la belleza percibida.» (Carlos)
Genial!
¡ Loquìsima, genial!.Me encanto
maravillosa,me gusta en todos los aspectos…es genial!
Interesante, intrigante, sensual y maravillosa¡¡¡¡¡¡
saludos¡¡¡¡¡
Una mujer inteligente, cultivada, matemática, académicamente brillante, que viene de ese extraño mundo de la Rusia post-socialista y produce un arte altamente femenino, puro y con una originalidad notable. En el Arte de esta dama se conjugan creatividad, técnica e inteligencia en las justas y adecuadas proporciones. En su página he visto, gracias a esta referencia querido Enkil,foto-pinturas o pintu-fotos o como quieran ustedes llamar a esta técnica hermosa. Parecen acuarelas hechas sobre fotografía o fotografías de acuarelas. Muy sensibles y bellas. Pero no se queda en eso la señora: aborda su arte con una visión afilada, crítica, profunda, que remueve ideologías purulentas, ideas costrosas y materia neuronal supurante. Que tremendo trabajo!
Asya, como todos nosotros, puede pasar del horror cotidiano a la contemplación estética de una servilleta primorosa, o, como en el caso de ella, a la de unos carros sobre los que se reflejan de manera maravillosa (el tratamiento pictórico es notable) unos edificios sin tiempo. Notable.
La artista, con todos sus méritos, se compromete con la vida y explora su mundo como fémina valerosa. Toda la fina sensibilidad descubre mundos sobre mundos, «como en las capas de una cebolla», su cuerpo, sangre y sensaciones vertidos en imágenes fuertes, desde una desnudez que más se siente que se ve, desde una perspectiva sensacional( de sensaciones) penetra el pensamiento de una sociedad que huele mal, que hiere, que destruye la fantasía del juego sensual y viola el espacio privado con imágenes icónicas de sadomasoquistas religiones. Abarca un amplio espectro de ideas su trabajo que es tanto de denuncia y exposición de circunstancias femeninas y humanas como de recreación visual en la belleza percibida. Excelente selección Enkil, que me alegras la mañana con Arte. Gracias.
Gracias por el comentario Carlos, me tomo la libertad de incluirlo como parte del post mismo. 😉
No vi aun nada original, estereotipo de presentacion de alguna idea o sentimiento.
Muy demasiado comun y ni siquiera raro-