Bruno Di Maio nace en Tripoli (Libya), de padres italianos; vive y trabaja desde hace años en la Toscana. Durante largo tiempo se dedica a la restauración, adquiriendo una habilidad técnica prodigiosa. Pintor, grabador, además de excelente acuarelista, trabaja en gran parte para el mercado internacional y así su obra se puede encontrar no solo en las mayores ciudades de Italia, sino también en Los Ángeles, San Francisco, New York, Tokio y Madrid, en colecciones públicas y privadas.
Bruno es uno de los nuevos mejores artistas figurativos de Italia. Sus obras reflejan su gran amor por las obras de la pintura renacentista y al mismo tiempo una fuerte autonomía expresiva. Di Maio intenta, con éxito, en su alegórica y surrealista interpretación del presente dar vida a la recordada calidad del pasado. La originalidad de su visión se ve en el suntuoso tema material, la calidad de sus claroscuros y los dramáticos efectos de luz sobre las figuras y objetos en sus pinturas. Su trabajo es agradable y carnal, rico en colores y vibrante en luz.
Joder, qué pasada de imágenes, ¿no?
Vaya, blog, ahmico. Me puedo tirar horas muertas por aquí.
Habrá que seguirle la pista.
Un saludo.
PD:Feliz Navidad anticipada a usted también,jajaja. He visto lo del corto, está que te cagas. Aunque los subtítulos,como decías, van coordinados sólo a ratos, se agradece mucho que esté eso en la red. Genial. Qué abuelo entrañable el notas.
Gracias Katrina, tu si que tienes un gran blog, caray, yo quería hacer algo así, pero mis limitaciones me lo han impedido, es una suerte contar con gente como tu que sabe darle algo de vida nueva a los blogs, y el tema de la lectura es un tema que me encanta.
Lo del corto voy a intentar como te dije coordinarlo algo mejor, es una pena que se cordine bien, porque la voz de Burrougs, la historia y el corto en si son fantásticos.
Un abrazo.
..su obra me parece lindisima que sensivilidad tan especial